Walter Gaitán, un ídolo Tigre.

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Si hablamos de jugadores que se volvieron ídolos en la institución felina, obligatoriamente tenemos que mencionar a Walter Gaitán, uno de...

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Si hablamos de jugadores que se volvieron ídolos en la institución felina, obligatoriamente tenemos que mencionar a Walter Gaitán, uno de los medios creativos más importantes que ha tenido Tigres en su historia.







Jugador nacido en La Rioja, Argentina el día 13 de marzo de 1977, y que hizo su debut profesional en el equipo de Rosario Central en la liga argentina de futbol. En su primer año jugó muy poco pero aun así fue vendido al Villarreal de España en el año de 1998, a vivir la experiencia europea que todo jugador de futbol anhela.
Lamentablemente para él, el conjunto del submarino amarillo no venía jugando muy bien y por consecuencia de los malos resultados tuvo que descender a la segunda división en donde disputo 48 partidos y anotó siete goles, para regresar a la máxima categoría española. El sueño europeo terminó y Carlos Bianchi lo trajo de vuelta al futbol argentino, pero esta vez al prestigiado Club Boca Juniors, en donde no le fue nada mal, ya que se convirtió campeón de la copa libertadores y subcampeón de la Copa Intercontinental 2001 perdiendo ante el Bayern de Múnich.
Y por fin llego a México en la año del 2002, específicamente a Monterrey, N.L y encontró cobijo en los Tigres de la UANL, el cual era dirigido por Ricardo Ferreti. Desde su arribo demostró su gran calidad y por qué le decían “El mago”, una pierna zurda privilegiada y excelsa una  visión de campo. Rápidamente se ganó el cariño de la afición y el odio del acérrimo rival, pues cada que había clásico regio en contra de los Rayados, “El divino” hacia goles importantes, básicamente disputó 194 partidos con la casaca felina, y marcó 80 goles.
Pero repentinamente su nivel fue a la baja considerablemente, tanto que llegó a ser banca y pidió a la directiva un permiso para regresar a su natal Argentina para resolver problemas personales que le aquejaban. Se ausentó tres meses y al volver, la directiva felina decide dejarlo ir de la institución, se fue del equipo pero no del corazón de sus seguidores, quienes aún lo recuerdan y lo consideran como ídolo histórico.
Después de eso ya no fue el mismo y jugó para el Necaxa y Veracruz, en donde pasó de noche, aunque con Necaxa, marco solamente tres goles, cabe resaltar que dos de ellos fueron contra el Monterrey y el segundo, sorpresivamente a los Tigres.





Se retiró en el 2012 en Argentina, puntualmente en el Atlético Rafaela, pero la afición auriazul ya lo tiene identificado como uno de esos pilares que construyó una gran historia en dicho club.



  

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